viernes, 11 de febrero de 2011

La Pata de Jamón y el Vino (parte 1)

Domingo tras Domingo, los "locos" del pedal se reunen cubiertos de escarcha a las puertas del Polideportivo de Cuevas.

La falta de muchos de sus miembros durante las semanas pasadas no afectaron al ánimo de grupo, que lejos de quedarse un grupico de 4 gatos... han ampliado el grueso de nuestras filas acogiendo a nuevos miembros, seguimos creciendo...


Por lo que a mi respecta vuelvo a los caminos tras un par de semanas de parón, y me encuentro con la sorpresa de ver entre la "multitud" a Alonso... (el pelailla), la sorpresa se torna admiración cuando recapacito sobre la estampa que dibuja su silueta... este tío no tiene perdón de Dios y a las puertas de la congelación se presenta vestido de corto...


Para seguir con las sorpresas, otro intrépido ciclista se presenta de la misma forma y manera... macho Camacho aparece con la equipación del club, pero es de todos conocido que Andrés Camacho siempre lleva consigo su "forro polar".


La lista de convocados en ésta mañana de Febrero son los siguientes: por un lado y representando a la familia González aparece Juan (el de enmedio de los Bilys), acompañado de Pedro "el poyo", Diego Vidal, Diego Peregrin, "Pelailla", Andrés Camacho, Baltasar Viudez seguido de su primogénito de homónimo nombre, Los hermanos Andrés y Paco "pinchuos", Víctor y sus jóvenes promesas Víctor y Álvaro.


Tambíen contábamos con la compañía de los nuevos Fichajes entre los que estaba Antonio... o según todos lo llamamos ese día Antoñico...


Como es costumbre, la ruta se decide en el mismo instante de dar la salida, ésta vez no sería menos y sobre la marcha improvisamos un recorrido urbano hasta el polígono para tomar la carretera de la Ballabona en dirección Huercal.


Tomamos el desvío de la carretera vieja con la intención de circular pos la vía de servicio hasta el "campico San Miguel", pero las ganas de hacer el cabra eran muchas por parte de alguno y decidimos tomar una alternativa más rústica, hasta la Ballabona.


Para disfrute del personal, el camino estaba plagado de trampas... más de uno posó sus nalgas sobre el terreno, entre ellos YO... pero por suerte no hubo testigos... solamente Juan González se percató de la incidencia.


Entre pitos y flautas llegamos a el lugar marcado con una X en la mente de todos, señalado expresamente como lugar de "repostaje" donde cada uno saca sus víveres y da cuenta de los manjares conque la "suerte" nos deleita.




Tras el más que merecido almuerzo volvemos a las andadas, en un tris aparecemos frente al restaurante Ballabona, la primera parte del recorrido iba llegando a su fin.


Tomamos el camino del campico San Miguel hacia el pantano, una serie cuestecicas hermosas nos estaban esperando... desde mi posición retrasada apenas pude saber nada del grueso del grupo, pues relegado a la función de coche escoba mi labor consistía en ayudar a los más necesitados...


Bonita debía ser mi imagen subiendo a pie las rampas, con mi burrica en una mano y la de Antoñico en la otra... en fin, cosas de la vida...


Llegamos al final de las rampas, ahora tocaba descender por el camino de Santa Barbara hasta la presa del pantano, con alguna pequeña subida intercalada.


Los hermanos Pinchuos junto con Pollo y Juan González se adelantan para llegar cuanto antes a las calles de Cuevas, mientras que el resto nos lo tomamos con algo más de calma.


La bajada hasta la presa no tuvo traspiés ninguno, tomamos el atajo de la fuente del marqués y llegamos hasta el asfalto del pantano.


Tras el descenso llegamos a la parte más llanica de la bajada del pantano... el grupo se muestra fuerte e imprime una marcha rápida que hace que Antoñico y Víctor hijo vayan perdiendo rueda...


Los ciclistas se iban marchando sin poder hacer nada, la solución... pegar un apretón hasta el grupo y tirón de orejas para que esperasen a los retrasados...




Se produce el reagrupamiento... y posteriormente la dispersión... pues cada cual seguía su propio camino hasta casa, menos unos cuantos personajes con ganas de fiesta, que tomamos camino hasta Portilla para ver el encuentro entre el Cuevas y el Garrucha.


El partido... Empate a dos goles, pero lo mejor de la jornada...


... en el sorteo del campo, al Señor Morales (que no vino a la ruta por tener un trancazo enorme... jijijijii) le tocó EL JAMÓN Y EL VINO!!!!


La idea aparece en la mente de todos como si de un chispazo se tratase (que fácil es manejar un premio que no nos pertenece), nos autoproclamamos copropietarios del premio y acordamos darnos un homenaje a base de Jamón en la próxima quedada...

Si señores... éste próximo Domingo día 13 (abstenganse de rimas) tenemos un abituallamiento de lujo, para mayor disfrute contaremos con la compañía del club senderista que nos dará acojida en su "cortijo cuartel" para pasar una jornada de convivencia.




Si no queréis perderoslo... ya sabéis... ¡que no SUS lo cuenten!






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