La representación estuvo a cargo de los siguientes individuos, por un lado tenemos al señor Morales, principal impulsor de la citada participación; Andrés Camacho, el rey de las ramblas; por último Diego Peregrín, la revelación de la temporada.
Cómo si de una estrategia de marketing se tratase nuestros intrépidos valientes se fueron distribuyendo por el pelotón apostándose en la zona alta, media y baja de la tabla; La salida la realizaron en grupo, pero Andrés avisaba de que sus piernas estaban listas para la Guerra y arrancó desde atrás para ir pillando a ciclistas y dejándoles en el camino, una pena que saliese retrasado pues en vista de su estado físico podía haber escalado algún peldaño más en la lista final.
La ruta que había sido modificada de su trazado inicial (y avisando con antelación suficiente) se componía de una ruta larga de 84km (frente a los casi 70 iniciales) y una ruta corta de aproximadamente 50km, sobra decir que la casta y la pasta de nuestra gente es especial y sin sopesarlo se lanzaron a la conquista de la ruta larga… toda una proeza pues en nuestras salidas nunca hemos alcanzado dicha cifra (geniales… sois geniales).
Andrés iba en la zona alta precedido por los más pros… pero según cuentan tenía una motivación especial… al parecer Andrés iba con la idea de terminar cuanto antes para tomar una barrita energética de las humeantes, el pobre tenía ansiedad y según sus palabras no fumó antes porque le daba vergüenza pedir un cigarro en los avituallamientos… manda pantalones…
Llegó a meta… y con su cigarro en la boca toma el móvil y marca un número… al otro lado estaba un servidor que se encontraba bronceándose a la luz de un flexo… sus palabras sonaban llenas de orgullo “si te pillo hoy te fundo”… jajaja no me cabe la menor duda de que éste era su día y que me habría destrozado realmente… me comenta que estaba a la espera del resto de la expedición y la verdad es que me alegró el día con su llamada.
En segundo lugar de los nuestros, aparece Diego Peregrín, éste se encontraba tan pletórico en su primera competición que no paraba de grabar con su móvil todo cuanto pasaba ante sus ojos, tan obvio era su afán de grabar que a Morales, que le seguía a unos minutos le preguntaron en un avituallamiento… “¿tú vas con ese que va en cabeza y el otro que no para de grabar con el móvil?”… con tanto grabar creeríais que os hartaríais de ver videos no?? Jajaja pues resulta que los duendes de la tecnología le jugaron una de las suyas y solo pudo almacenar en su memoria (digital porque la otra la conserva) un único video (al que por cierto no podemos acceder por problemas técnicos).
Morales luchó con afán en una rambla impracticable… tan impracticable era que hasta el propio Andrés Camacho dijo tener problemas en ella, miedo me da solo de pensarlo; Llegó el último de los nuestros, pero completó con éxito la ruta larga… eso sí, desde que va al gimnasio se está volviendo más enclenque en la bici… Tú mismo…
No se me puede olvidar que en esta ruta también apareció un fantasma; tranquilos no llaméis a Iker Giménez, que se trata de un subgénero de ciclista de los que le encanta fanfarronear y afirmar… he hecho la larga… y luego resulta que ha hecho la corta invirtiendo en ella más tiempo que los nuestros en hacer la larga… (Panales de rica miel brotan con sus palabras), se pilla antes a un mentiroso que a un cojo (perdón es que hay gente con la que no se puede...).
La experiencia fue gratificante para nuestros participantes y era sin lugar a duda la primera prueba de nuestro club ya constituido y con nuestros colores propios… (grandísimos los Tres mosqueteros VandeRuta)
JORNADA DE DOMINGO
Salgo a la calle con las ganas de volver a montar en mi burrica, la saco de su camita donde estaba guardada durante algunas semanas y al depositarla con dulzura en el suelo escucho a lo lejos el rodar de una bici… me giro con intriga y aparece cruzando mi campo visual Diego, vestido con el uniforme de gala, éste también con intriga mira hacia el interior de mi calle tratando de buscarme… que alegría cuando nos vimos.
Recorrimos juntos el camino hacia la sede de los Domingos, llegamos al parque Luis Siret, donde aparece a lo lejos un punto rojo en movimiento, sin lugar a dudas se trataba de Jose, que iba en nuestra búsqueda, ésta vez si tendría éxito pues ya sabía del horario de verano y nosotros le seguíamos la pista.
En la sede nos encontrábamos, Fran Sielva, Andrés Camacho, Diego Peregrín, Jose “ π “(si existe un cantante conocido como Prince que durante un tiempo se hizo llamar por un símbolo, nosotros tenemos a otro ciclista que se lo puede permitir… su nombre en clave es π que viene siendo 3,1415…) y por último allí estaba Yo (Guerry).
A todos nos sorprende la ausencia del señor Morales, pero usamos el comodín de la llamada y nos dio la respuesta correcta… Estaba reparando un pinchazo; le emplazamos en la gasolinera para desde allí emprender la ruta…
Una vez reunidos los interesados emprendemos el camino elegido con anterioridad; trataríamos de llegar al campo de Golf Valle del Este… para ello pasamos por la rotonda de Desert Sprint… yo no digo na… si fea no es… pero que no me digas que han quitao el escudo de Cuevas pa poner un minigolf… seguimos para abajo y tomamos la carretera de la desaladora antigua, la que va a la piscina climatizada y llegamos al río.
Salimos del rio para pasar por el cruce de Galasa y adentrarnos por el camino del desguace del MISSI… servicio de grúa 25 horas al día (así reza en su publicidad), Era la primera vez que lo transitaba y la verdad es que es una muy buena opción para ir hasta Vera sin pisar carretera, pasamos por las instalaciones de padel indalo que parece un oasis tenístico en mitad de la nada y llegamos hasta Vera por la carretera de la Algarrobina (si si si Algarrobina… que eso de Ribina es que no suena ni bien siquiera) atravesamos Vera por las cercanías de la plaza de toros y tomamos la carretera del Paraje hoya del Gallego (no me conozco yo esa zona ni ná)
La carretera es el camino viejo hasta Garrucha (eso de viejo es relativo porque multitud de jóvenes lo usa los fines de semana pa evitar a los de verde) pasamos por delante de mi antiguo lugar de trabajo Agro-Almagrera y continuamos avanzando hasta llegar a Garrucha sin la menor complicación.
En el cruce con la carretera tomamos el desvío que pasa junto al almacén de pescados Dense y que se va adentrando en dirección Vera pero más concretamente hacia el complejo de golf Valle del Este.
Nos adentramos por el entramado de calles del complejo y sentimos cierta envidia del operario encargado de recoger las pelotas de golf montando en su cochecito… jejeje que mala es la envidia, pues mientras nosotros pensábamos que ese es el mejor trabajo de mundo (discrepo… los hay mejores) él nos miraba como diciendo… eso es vida, ellos de ocio y yo aquí pringando… cada loco con su tema.
Salimos del Valle del Este y tomamos el cruce hacia el polígono la salaosa, el camino que íbamos a tomar queda a la derecha de la gasolinera, pero no pudimos evitar alzar la vista al frente donde un soberbio camino empinado nos tienta con sus cantos de sirena, nos lanzamos a la conquista Jose “π”, Sielva y Yo; en cabeza me encontraba yo, con el cuerpo adelantado y sobre la punta del sillín apretando glúteos para no tener un percance con la dichosa punta… y para arriba sin respiro, Fran aparece en segundo lugar y tras éste llega “π”, la subida nos deja sin aliento, y la bajada promete ser divertida.
En la lontananza nos esperan los tres mosqueteros, con los ojos abiertos para ver los posibles percances de la experiencia.
Jose baja en cabeza y un ligero traspiés le hace salir despedido de la bici pero sin llegar a caer al suelo… en el aire llegan los ecos de la risa del señor Morales… éste no perdona una. Tras el susto, Fran se lanza en su busca con un magistral descenso y tras éstos Yo, Fran supera a Jose y se adentra por un mar de cardos… adelanto a Jose y de cabeza al mar de cardos… mientras estos se desternillaban viendo cómo sufríamos los efectos de nuestra desafortunada elección del camino (crueldad en estado puro).
Mientras nos reagrupamos aparece en escena un ciclista anónimo (en su casa lo conocen fijo) que sin siquiera dirigirnos un saludo ni una mirada emprende el camino hacia Antas… los Tres mosqueteros que se habían quedado sin subir tenían ganas de demostrar a ciclista anónimo su superioridad física y emprenden una caza lenta pero que nos hace retrasarnos a Fran, Jose y a mí que ya no íbamos sobrados de fuerza precisamente.
Durante todo el trayecto hasta Antas fuimos divididos en dos grupos, llegamos a Antas y allí nos esperaban los de cabeza… con una rubia cada uno… lo que estaba claro es que ellos tenían puesto su GPS corporal en dirección a un bar y habían llegado a destino.
Tras el avituallamiento emprendemos el camino de regreso a casa, atravesamos Antas por su calle principal, cruzamos el puente y comenzamos una subida exigente, pasamos por el Real de Antas y cruzamos para El Zorzo, el camino viejo que conduce a Cuevas, El trío de cabeza hacía el esfuerzo de ir esperándonos, llegamos a la carretera de la Ballabona (lugar donde se encuentra el taller de Diego “PEUGEOT”) y tras esto camino hacia el final de etapa en el Lagar.
La cosa no termina aquí, el acuarius de cebada nos confiere unas propiedades increíbles y nos hace sentirnos superhéroes, el recordatorio de un video "privado" en las escaleras del parque nos plantea un reto… trataríamos de descenderlas, entre ellos el Señor Morales era el candidato más firme para que lo intentase (sabíamos que no lo haría alegando moñeces).
Nos encontramos con Fernandito que salía de una visita al Médico por un problema de lumbares (parecía que se hubiese metido un palo…), le confesamos nuestras intenciones y nos insta a que le demos noticias sobre lo que acontezca.
Llegamos a las temidas escaleras… nos miramos… los nervios empiezan a hacer su aparición y poco a poco la gente se va rajando; pero Jose de una manera casi imprevista y sin mucho vacilar se tira hacia abajo, no recuerdo su frase… pero era digna. Consigue sortear lo más difícil..., solo diré que su rueda delantera quedó maltrecha.
Tras el bajé yo, primero con mi bici y luego tras la insistencia de Fran lo realicé con su bici doble… se me cae la baba al recordarlo… yo quiero una de esas… “mi tesorooooo”
Fran se anima y al ver que su bici lo lograba no duda en hacerlo él y lo consigue con honor.
La cosa se da por terminada… pero esto no es todo. VandeRuta sigue en los caminos.
videos de primera
